Tras haber trabajado los movimientos del robot en el aula mediante la plantilla de papel y comprobarla en la pizarra digital, se pusieron el peto del robot diseñado por los niños y practicaron los movimientos en el suelo.
El objetivo era llegar a la casilla felicidad, pero antes debían pasar por las casillas solidaridad y cuidar la naturaleza, las cuales nos ayudan a conseguir esa felicidad. Así mismo debían evitar caer en las casillas guerra e injusticias.
El resultado ha sido estupendo y les motivó mucho el juego.
Si pinchas en nuestra mascota puedes ver más fotos de la actividad.
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